sábado, 11 de enero de 2014

Mááá, m’abuuuuurrroo

En el prólogo a La oficina en The New Yorker, Jean-Loup Chiflet pone como ejemplo del jefe que no tiene nada que hacer (y por tanto, se entiende que se aburre) la siguiente viñeta.


Lo que yo no sabría decir es si el aburrimiento de Felipe González ha sido tal que le ha dificultado saber con quién le interesaba hablar, fuera por teléfono o en persona (no es cuestión de discriminar, que por algo es socialista).

Créditos:
Viñeta de Henry Martin, publicada no sé cuándo en The New Yorker, tomada de la selección realizada en 2012 por Jean-Loup Chiflet con el título La oficina en The New Yorker, publicada en 2013 por Libros del Asteroide, de la biblioteca del autor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario